Casa Mariol

Innovareslamejormaneradecreartradición

Casa Mariol equivale a más de 100 años dedicados a la tierra y a la elaboración de vinos en la Terra Alta (Catalunya). Desde que José María Vaquer Bes empezara a comercializar el vino que de toda la vida se elaboraba en su casa de Batea (un pueblo en el que la viña es una religión) en su flamante Opel Blitz hasta ahora, son 3 las generaciones que han mantenido viva la tradición de Casa Mariol. Lo suyo es devoción por el vino, por lo que hacen y por lo que son. Y se nota en lo que bebes, cuyos responsables últimos son Josep Maria Vaquer Llop (viticultura y enología), Marta Vaquer Llop (producción) y Miquel Àngel Vaquer Llop.

Esa devoción también se nota en lo que ves, fruto de la mente visionaria y el espíritu transgresor de Miquel Àngel Llop, la tercera y genial cabeza de Casa Mariol que tenía en sus manos, entre otras cosas, la dirección creativa de la marca. Por desgracia, Miquel Àngel murió durante la pandemia de Covid19, pero la huella que ha dejado tanto en su marca y en el mundo del vino, como en aquellos que le conocieron, es imborrable.

ClienteCasa Mariol
Fecha2021

The Challenge

Casa Mariol lanza una nueva línea de productos y contacta con nosotros para crear su identidad gráfica. A eso se suma el rediseño del catálogo de todos sus productos y del logotipo del Celler y de Casa Mariol. El reto reside en la esencia del propio cliente: ¿cómo construir identidad, carácter y personalidad en el universo de una marca que es ya todo identidad, carácter y personalidad y un referente a nivel de lenguaje visual?

The Solution

La nueva línea de producto que lanza Casa Mariol, “Licors Generosos”, comprende 3 nuevos productos: Mistela, Moscatell y Vi Ranci. Y 3 premisas a la hora de abordar el diseño de su identidad: evitar el lenguaje pretencioso, seguir la estela rompedora que instauró Miquel Àngel a la cabeza de Casa Mariol y renovar la imagen clásica del mundo de los licores tal y como ya habían logrado con el del vermut.

Casa Mariol es reconocida por recurrir al lenguaje digital. Así que optamos por trazar una nueva línea en este territorio y unir el código industrial del packaging con ilustraciones digitales creadas a partir del Text-Art/Ascii. Aprovechamos también esta forma de ilustrar a través del texto para insertar un mensaje oculto en las botellas. Este mensaje dice: Miquel Àngel Vaquer ♥.

En síntesis, buscamos la innovación dentro de lo que identifica inequívocamente a Casa Mariol.
Casa Mariol
El rediseño del catálogo es otro reto dentro del reto “paraguas” porque implica la convivencia y unificación de las diferentes líneas gráficas de cada gama de productos. Este requisito era indispensable para que, en caso de nuevas incorporaciones al catálogo, pudieran llevarse a cabo sin necesitad de rediseño editorial ni modificaciones gráficas.

Nuestro punto de partida para abordar esta empresa es el bloc de notas de un bar, un formato sencillo y tan cañero como cañí, que nos permite aglutinar la variedad de estilos gráficos de las diferentes tipologías de producto a través de una dirección de arte limpia y potente a la vez.

Para los acabados del catálogo optamos por un toque transgresor y casual, como la manera de hacer de Miquel Àngel: una encuadernación de wire-o plateado, cubiertas de acetato, papel satinado de bajo gramaje y adhesivos.

Una vez más, y aunque parezca contradictorio, buscar la innovación nos ayuda a construir coherencia y cohesión.
Casa Mariol
Los logotipos del Celler y de Casa Mariol deben tener identidad y carácter propios pero, a la vez, transmitir que forman parte de una misma familia. Siendo dos logotipos especialmente determinantes para la marca, pensamos a futuro y eso nos hizo decantarnos por la sencillez, para que la posible evolución posterior de los logos fuera fácil, y por la versatilidad, para que fueran capaces de adaptarse de forma natural a cualquier actividad o aplicación de la empresa. Teniendo estas premisas, la composición tipográfica y la formalización minimalista fueron nuestras grandes aliadas.
Sirva esta colaboración con Casa Mariol como pequeño y humilde homenaje a Miquel Àngel.